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Angel Guillén és Secretari de Comunicació de Ciutadans a Tarragona

Angel Guillén és Secretari de Comunicació de Ciutadans a Tarragona

A trasluz: “Luz reflejada por la superfície de un cuerpo”. Si dejamos a un lado el negro sobre blanco de la Constitución española de 1978, la luz que refleja la Carta Magna alumbra a lo largo y ancho del variopinto territorio español.

Pero, ese texto, refrendando pese a quien le pese por la mayoría de los españoles, incluido también el pueblo catalán y con amplia mayoría (invito a repasar las portadas de entonces), ha supuesto una bocanada de aire fresco, de transformación y modernización para todos nosotros. Ahora, le echamos la culpa de todos nuestros males a ella, que nos ha dado una pluralidad de regiones, singulares y cada una de ellas especiales, cuatro lenguas, democracia parlamentaria y no nos olvidemos, nos trajo consigo la paz y concordia entre españoles. No percibo como ahora, teniendo un marco de convivencia entre todos los ciudadanos, circulando a través de Europa, algunos, pretenden anteponer sus intereses, peculiaridades y tapar con una gran “estelada” esa luz que refleja la Constitución.

Alimentados por una crisis galopante, fruto de la perversión de la clase política española y catalana, por la falta de respeto a los principios morales y éticos que debe imperar en una democracia moderna y sólida como la nuestra, la de todos. Alimentados, también por aquellos que ahora reniegan de sus compatriotas, hombres y mujeres de diferentes orígenes, que emigraron a Cataluña, tierra próspera, moderna y cosmopolita, que le debe mucho a esa gente. Y ellos, o nosotros, porque yo me considero hijo y nieto de emigrantes, le debemos mucho a Cataluña. Cataluña también es nuestra, y no la entregaremos a la perversión de la historia, la convivencia y la legalidad. Su alimento es la soberbia. Tanto catalanes de “socarrel” agradecidos a las gentes de provincias castellanas, como los catalanes de diversos orígenes, nuestros alimentos son pucheros de humildad, con ingredientes magníficos que nos permite seguir afirmando y demostrando que es mucho más lo que nos une, que lo que nos separa.

Eso que nos une, es la luz que refleja el sol del mediterráneo, nuestro mar que nos baña y compartimos, por el cual no hay barreras, ni fronteras, sino luz que nos alumbra a todos. No nos olvidemos, que merecemos seguir juntos, esperanza y altura política, para solucionar pequeños “rifirrafes” que todas amistades, matrimonios o parejas sufren y que estoy seguro, por nuestro bien y el de todos, que seguiremos juntos. No dejemos que jueguen con nosotros, que el árbol no nos deje ver el bosque, digámosles que el problema son ellos, y no los ciudadanos.

Angel Guillén és Secretari de Comunicació de Ciutadans a Tarragona